“Un ciervo herido salta más alto”, Emily Dickinson (1830-1886 · Amherst, Massachusetts)
Poc s’assemblava aquell te al que estava acostumada a prendre cada tarda, abans d’aquella maleïda guerra. Però ella, fidel als seus hàbits, seguia bevent la seva infusió amb la seva crema de llet. No era gaire ortodox prendre el te d’aquella manera, però opinava que ningú li havia de dir com fer les coses. I …
Aquell matí el Bartholomäus tenia el cap emboirat. Portava dies capficat, pensant com havia d’actuar. I tot i que la policia desconeixia la seva existència, ell no deixava d’amagar-se i es movia entre les ombres de la nit, a la llum de la lluna, la soledat en unes ocasions i el xivarri ineludible tràfec de persones …
-… y cuatro neumáticos Rud Ketten Rieger… No siguió leyendo. Ya la había pagado en el establecimiento y no había comprobado los datos de la factura. Miró de nuevo el documento mientras lo sujetaba con las dos manos, miró al cielo y apretó los labios. Dobló cuidadosamente el papel y se lo metió en el …
Va decidir que no podia esperar que es portessin en cotxe. S’havia aixecat molt d’hora aquell matí i tenia pressa per arribar a casa. Només portava deu minuts esperant a la Kirchplatz, davant de la porta de l’església de St. Alban. Però com a persona puntual que era, no concebia que la gent sofrís imprevistos …
Andaba por el casco antiguo recorriendo calles y callejones, viendo el ir y venir de gentes de varios rincones del mundo. Se podían apreciar olores y fragancias que evocaban días pasados, situaciones pretéritas y recuerdos añorados. Pasé por delante de una panadería vetusta. Los ventanales de sus escaparates no habían descubierto aún el doble cristal, …
Era una cocina amplia y ordenada. En el centro reposaba una mesa bien organizada, repleta de cacerolas, ollas y tapaderas. En la pared colgaban de unos ganchos cucharones y otros cacharros. Gustave había tenido una mañana tranquila. Hasta que, ordenando su despacho, encontró en una caja ya olvidada en un armario repleto de archivos, aquello …
Joseph Poherhatz acudía casa semana a ver a su nieto Irkim. De esta manera veía a su hijo Orlomk, pasaba con ellos la tarde, y disfrutaba del sabroso, intenso y aromático chocolate a la taza con menta que le preparaba su nuera Helda. Por culpa de un problema en el tranvía, Joseph llegó a casa …
-Es una ricura de niño… ¡Que ojazos! Nuestro Führer estaría orgulloso de él si lo conociera… -Sí que es guapo, sí- -respondió la madre del joven ario, frau Hoerszmalek. La anciana Helen Blikgrig, hija del condecorado mariscal prusiano Henrich Himlermer barón von Blikgrig, esbozó una breve sonrisa y continuó: -Y dicen que a esta edad …
Angus Hofftenmayer se levantó aquella mañana con una duda que volvía a menudo a su dura cabeza una y otra vez. No llegaba a entender porqué el color naranja era el único que sabía a él mismo. El amarillo sabía a limón, el verde a menta, y el rojo recordaba a la fresa… Pensó en …
